skip to main |
skip to sidebar
socos / ENXOVALHO
Un duro golpe, dada la gran tendencia a huir manifestada en los últimos años por los gobernantes de Lisboa. Primero fue Guterres, en 2001, que se dijo incapaz de conducir los destinos del país, dado el "pantano" hacia donde caminaba. Después fue Barroso, que a la primera oportunidad prefirió cambiar Lisboa por Bruselas. Y sólo cuatro meses después, su sustituto fue destituido por el presidente de la República, harto de polémicas relacionadas con la figura de Santana Lopes. Un desgaste para el electorado y una sensación de que el país no es gobernable.
Pero antes de irse de vacaciones, Sócrates encendió la hoguera final que acabó por castigar su popularidad: eligió a diversos miembros del aparato del Partido Socialista, incluidos amigos personales suyos, para importantes cargos en la administración de empresas públicas o controladas por el Estado. Tras defender un discurso de austeridad, en el que insistió "en la moralización de la vida política y pública", impulsando leyes que recortaban los privilegios de los políticos y altos cargos de la Administración, era imposible cometer un error más grave. (Subl. n/) Convenhamos que seria difícil conseguir maior enxovalho, através de um jornal que pertence a um grupo que está interessado em comprar uma televisão em Portugal, com o acordo do citado Sócrates, segundo é do conhecimento público.